Fotos creadas con IA.

La inteligencia artificial y el fotoperiodismo: ¿aliados o enemigos?

En el siglo XXI, la tecnología de la inteligencia artificial (IA) está transformando el mundo en diversas formas, y el fotoperiodismo no ha sido una excepción. Esta relación entre la IA y el fotoperiodismo ha generado un intenso debate en los medios de comunicación. A medida que la IA continúa avanzando, es crucial comprender los riesgos y desafíos asociados, así como aprovechar sus beneficios de manera responsable y ética.

Uno de los aspectos en los que la IA ha demostrado su utilidad en el fotoperiodismo es la clasificación y etiquetado automático de imágenes. Los fotoperiodistas capturan una gran cantidad de imágenes durante sus coberturas, y la IA puede ser de gran ayuda para organizarlas y categorizarlas de manera eficiente, lo que ahorra tiempo y esfuerzo.

No obstante, también se han dado casos en los que la IA ha generado imágenes manipuladas, cuestionando los límites entre lo real y lo falso. Esta dualidad ha llevado a reflexiones sobre la autoría artística, la autenticidad y la credibilidad de las imágenes producidas por la IA.

El impacto de la IA en el fotoperiodismo

Sin embargo, surge la pregunta de si la IA cambiará la forma en que entendemos y practicamos la fotografía. Algunos fotoperiodistas han explorado el uso de la IA en sus proyectos, como Michael Christopher Brown, para crear una serie de imágenes que exploran eventos históricos en Cuba. Si bien su trabajo ha sido aclamado por su creatividad e innovación, también ha sido objeto de críticas por difuminar los límites entre la fotografía real y la falsa.

Otro ejemplo notable es el caso del artista alemán Boris Eldagsen, quien ganó el prestigioso premio Sony World Photography Awards en 2023 con una obra titulada «Pseudomnesia: The Electrician». Esta imagen fue creada en parte utilizando inteligencia artificial, y Eldagsen defendió su obra como una forma legítima y honesta de expresión artística, cuestionando la frontera entre lo verdadero y lo imaginario.

En 2023, ha habido una serie de casos de alto perfil de imágenes manipuladas por IA que se utilizan en fotoperiodismo. La foto del Papa Francisco con una chaqueta Balenciaga y la de Donald Trump siendo arrestado se crearon con MidJourney, una de las herramientas más populares y sofisticadas de Inteligencia Artificial para generar imágenes. Sus resultados son notorios y abren un debate sobre cómo su mal uso o su descontextualización pueden profundizar los problemas de desinformación que hay asociados actualmente a las redes sociales.

De acuerdo con Luis González, docente de periodismo en la Universidad Internacional de la Florida (FIU), la inteligencia artificial se basa únicamente en el contenido proporcionado en el aprendizaje automático para su desarrollo. Sin embargo, el factor decisivo lo tiene el ser humano. Los editores de sección y los periodistas con experiencia desempeñan un papel fundamental en este sentido. González destaca la importancia del pensamiento crítico, una habilidad que el sistema de inteligencia artificial generativa carece. Menciona que el periodista posee un instinto, una intuición que se basa en la experiencia y la comprensión de situaciones similares en el pasado, una cualidad que la inteligencia artificial no puede replicar.

La perspectiva de los fotoperiodistas

Por su parte, Florantina Singer, en su artículo «No son periodistas, son avatares: el chavismo impulsa propaganda hecha con inteligencia artificial«, nos habla de cómo los videos de los falsos presentadores que hablan de Venezuela han obtenido cientos de miles de vistas en YouTube, y se han vuelto virales en redes sociales. Esto perjudica al periodismo local al promover la desinformación, socavar la credibilidad de los medios de comunicación legítimos y contribuir a la polarización social. Estos factores minan la calidad del debate público y dificultan el ejercicio de un periodismo independiente y responsable, lo cual es fundamental para una sociedad democrática.

Gervasio Sánchez, reconocido fotógrafo y periodista especializado en conflictos armados, expresa su preocupación por el impacto de la IA en el fotoperiodismo. Él lamenta la desinformación y las imágenes fraudulentas que proliferan en las redes sociales en la era de la posverdad, donde la realidad se distorsiona bajo el peso de las emociones. Sánchez destaca que no solo son responsables aquellos que engañan, sino también aquellos que permiten el engaño. Asimismo, defiende la importancia del factor humano y la necesidad de preservar el espacio moldeado por el corazón, invisible para las máquinas.

Medidas para proteger la profesión y la veracidad de las imágenes

Ante los desafíos planteados por la IA, es fundamental que los fotoperiodistas tomen medidas concretas. Algunas de estas medidas incluyen:

  1. Formación en el uso de la IA: Los fotoperiodistas deben familiarizarse con las herramientas y tecnologías basadas en IA para comprender sus capacidades y limitaciones, utilizándolas de manera ética en su trabajo.
  2. Verificación y autenticación de imágenes: Es esencial desarrollar habilidades y utilizar herramientas especializadas para detectar manipulaciones en imágenes generadas por IA, verificando su autenticidad.
  3. Colaboración con organizaciones relevantes: Establecer alianzas con instituciones dedicadas a la ética en el periodismo y la protección de la veracidad de la información fortalecerá la capacidad de abordar los desafíos planteados por la IA.
  4. Defensa de principios éticos: Mantenerse fieles a los principios éticos y deontológicos, como la verificación de fuentes y el respeto a los derechos humanos, es clave para preservar la credibilidad del fotoperiodismo en un entorno dominado por la IA.
  5. Sensibilización del público: Los fotoperiodistas deben asumir la responsabilidad de educar al público sobre las implicaciones de la IA en el fotoperiodismo y la importancia de la veracidad de las imágenes, fomentando la comprensión crítica y el valor de la información verídica.

La relación entre la IA y el fotoperiodismo plantea desafíos y oportunidades únicas. Si bien la IA puede ser una herramienta valiosa en la clasificación y organización de imágenes, también plantea riesgos en cuanto a la autenticidad y la manipulación de estas. Los fotoperiodistas deben tomar medidas proactivas para proteger su profesión y salvaguardar la integridad de las imágenes. Al hacerlo, podrán aprovechar el potencial de la IA de manera responsable y ética, preservando la esencia del fotoperiodismo y su papel crucial en la narración de historias verídicas en un mundo en constante cambio tecnológico.

2 comentarios en “La inteligencia artificial y el fotoperiodismo: ¿aliados o enemigos?”

  1. Juan Luis Heredia Álvarez

    Se está desarrollando una brecha muy amplia entre lo real e imaginario, debemos ser muy cautelosos con el pasar de los años con estas nuevas tendencias agresivas en su contenido y expresión; dado que, si olvidamos que lo real es lo que nos hace sentir vivos, estaremos sumergidos en un mundo Artificial sin Sentir que Vivimos.

    Buen Artículo PUPO

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