Hace poco leí un artículo donde el autor cuestionaba si era correcto seguir llamando fotografía a la fotografía digital, desde el punto de la acción y la herramienta en uso. Argumentaba que los cambios en el léxico, por lo general eran muy lentos y que no iban a la par con los constantes avances tecnológicos. Consideraba que las cámaras digitales no producen imágenes, sino “una serie de datos numéricos”, que “solamente imprimiendo ese archivo digital, podremos hablar de fotografía”. Concluía su explicación diciendo que únicamente estaremos fotografiando, en todo el sentido de la palabra, cuando lo hagamos con cámaras análogas, de esta manera se estará “disfrutando de la fotografía de una forma más auténtica”.
Según el psicoanalista Jorge Schvartzman en su libro “Tenemos Internet Dios no ha muerto” menciona que la tecnología posee un papel importante en la actualidad por el lugar que ocupa y cumple con respecto a productividad, “léase necesidades humanas”, pregunta “¿A qué tienden los avances tecnológicos actuales? A que la tecnología sea: más portátil. Si no se puede ser portátil, que esté localizada en más lugares. (…) Más masiva, al ser más económica. Que cumpla más funciones. Y que sea más fácil de usar. La característica fundamental de todos los aparatos, desarrollo, y actualmente aplicaciones, es para decirlo rápidamente, intentar llevar la vida virtual todo lo que hacemos en la vida real”, comentó Schvartzman.
Los pensamientos de Jorge Schvartzman me invitan a reflexionar, por ejemplo, en cómo la tecnología ha cambiado al fotoperiodismo. Me atrevo a decir que, hoy en día, la fotografía digital otorga seguridad, representación de progreso e inmediatez. Muchos recordaremos, en la década de los 90, las imágenes que enviaban a los periódicos los servicios cablegráficos de agencias internacionales. Eran fotografías impresas “tipo papel fax” algunas difíciles de romper, que tardaban horas en transmitirse, con calidad muy mala, sin mencionar las conexiones poco fiables.
Ahora, el funcionamiento de la imagen digital en el fotoperiodismo se ha perfeccionado, no sólo podemos ver inmediatamente las fotos después de tomarlas, sino que también, el fotógrafo tiene la facilidad de transmitir desde la cámara las imágenes registradas, gracias a conexiones inalámbricas en la misma. Seguramente, todos estos progresos tecnológicos han favorecido enormemente la industria comunicacional.
Con los requerimientos en la inmediatez de la noticia, no creo que deseen regresar a los tiempos de disparar con película, cuando se debía procesar el revelado y copiado, en el laboratorio y así poder ver el producto terminado. Con las cámaras analógicas, no se podía ver el resultado de inmediato, tampoco volver a tomar la foto para que quedara perfecta. En otras palabras, tanto con la fotografía analógica como con la digital obtienes una foto auténtica y real.
Por otra parte, está la fotografía con móvil o celular, igualmente en el fotoperiodismo se está incorporando, desde hace ya unos años atrás, los celulares con cámaras, por su poder y facilidad en compartir, la inmediatez y la portabilidad. Rodrigo Rivas, fotógrafo freelance y técnico digital, quien ha incorporado el celular a su trabajo profesional, menciona en su libro “La fotografía móvil”, que la fluidez y ritmo de vida que vivimos nos permite “la posibilidad de compartir al instante, la facilidad de fotografiar en numerosas situaciones y, sobre todo, ser la cámara que siempre llevaba encima, ya que forma parte de un aparato con otras funciones necesarias, convirtiendo a mi smartphone en la cámara que más he usado (…) Muchas personas consideran a la fotografía móvil la oveja negra dentro del terreno fotográfico. Sus argumentos se basan, principalmente, en la supuesta baja calidad de imagen que ofrecen los sensores y la falta de capacidad de sus lentes para fomentar la creatividad”, comentó.
En conclusión, habrá personas que consideren que su vida debe ser documentada con un teléfono inteligente, así como muchos ambicionan hacerlo con una cámara fotográfica, sea compacta, réflex, sin espejos u oscura. Sin olvidar mencionar, los antiguos procesos fotográficos alternativos, que hoy en día están surgiendo por todo el mundo, gracias a fotógrafos artesanales de la imagen química. Indistintamente como vemos la vida y cómo la vivamos, nosotros decidimos cómo queremos plasmarla, sin duda alguna, será tan auténtico el resultado con cualquier dispositivo que lo haya hecho. No olvidemos la frase de Mike Shatzkin “Todo lo que pueda ser digital dejará de ser físico”.