Desde un principio me interesó el trabajo exhibido en la pasada exposición “Xamatari, la gente del tapir”, del artista plástico Roberto de la Fuente, llevada a cabo en los perímetros de la Embajada de Francia, ubicada en la urbanización Las Mercedes de Caracas. Serie de imágenes, que nos hablan de todo lo que comprende la vida cotidiana de los Yanomamis.
Cada quien tiene una visión distinta del cuerpo humano, para ellos, los indígenas, es normal la desnudez. Por eso sus cuerpos son parte fundamental en las prácticas tradicionales y culturales. Lo vemos, cuando utilizan sus cuerpos como lienzo de decoración. En palabras de Roberto: “El elevado sentido estético Yanomami alcanza su máximo esplendor en el ornato corporal; refinados dibujos de onoto y hollín al que incorporan una ilimitada paleta de coloridos tocados hechos con plumas de sus aves más exóticas y pieles curtidas, como ofrenda para sus huéspedes en las periódicas visitas a sus aliados de otros shabonos”, comentó.
La desnudez forma parte de múltiples culturas de pueblos en diversas partes del planeta. La India, Australia, África, Brasil y Nueva Zelanda son ejemplo de ubicaciones geográficas donde el ser humano tiene una interpretación muy particular del tema.
A lo largo de la historia del arte, el cuerpo humano ha sido fuente de fascinación para los artistas. Tal es el poder de la imagen humana que su representación en los distintos modos artísticos ha perturbado al espectador. Incluso, en plena era tecnológica, algunas plataformas audiovisuales, son estrictas en sus políticas sobre imágenes de desnudos y contenido sexual. Ejemplo de ello es la red social YouTube, que permite subir o compartir videos en vivo.
«Me concentro en la parte del cuerpo que considero la parte más perfecta en ese modelo en particular”.
Robert Mapplethorpe
En la pintura, una influencia importante son las obras del artista Yves Klein, conocido por crear nuevas técnicas hacia el arte. En su trabajo Antropometría realizado en la década de 1950, Klein experimentó aplicando pintura en mujeres. Un gran lienzo, aquí fue arrastrando estos cuerpos de un punto a otro ocasionando líneas, trazos abstractos de la forma humana.
Así como Klein utilizaba el cuerpo como pincel en sus lienzos, el fotógrafo Robert Mapplethorpe se enfocaba en las formas y fragmentos del mismo. Afirma el portal TATE que el artista “buscaba la perfección en todos sus temas, desde desnudos y retratos hasta flores y arquitectura. Esta perfección está ejemplificada por sus célebres estudios de la figura humana; incluyeron modelos negros, bailarines y culturistas, todos con cuerpos musculosos y bien definidos”. Mapplethorpe decía «Me concentro en la parte del cuerpo que considero la parte más perfecta en ese modelo en particular”.
Todos estamos hechos a semejanza, estamos relacionados. Pero, esto puede ser un engaño, porque creemos que la manera en que observamos y hacemos algunas cosas son universalmente humanas y naturales. Nos escandalizamos cuando vemos un desnudo. Lo importante, es el respeto y mantener la mente abierta y ver los cuerpos de manera imparcial.